CHARLA
El sevillano, David de Coz, un canterano del Betis, que disfruta de nuevo del fútbol de Segunda A, en el CD Lugo
Entrevista a David de Coz
30/abril/2014
David de Coz es el prototipo de lateral capaz de subir la banda y cerrar a sus pares en defensa. Un carrilero de ida y vuelta. Aporta su experiencia, velocidad y calidad al colectivo. Una persona al que uno siempre elegiría como compañero. Bonhomía.
¿Qué significa para ti el Club Deportivo Lugo?
Para mí fue el equipo que me volvió a dar la oportunidad de jugar otra vez en Segunda División. Es un equipo en el que me tratan muy bien. Me tratan como si estuviera en casa. Es muy fácil adaptarse aquí a este equipo. Los mismos compañeros, la gente del club y la afición desde que llegué me han tratado muy bien. Así que muy agradecido por el trato desde que llegué.
¿Cómo fue el proceso de las conversaciones, la primera toma de contacto cuando fichaste en el verano de 2012?
Fue obra del representante, que era quien lo llevaba todo. Fue rápido. Estaba jugando en Segunda B y cuando te sale una oferta de Segunda y de un equipo al que ya nos habíamos enfrentado y ya sabíamos cómo era, no la puedes rechazar. Era una propuesta importante. Fue rápida la decisión.
¿Con qué momento te quedas de este tiempo en el club?
Escoger un momento no está bien. Me tengo que quedar, de momento, con la temporada entera del año pasado, que fue histórica para el club. Nosotros hicimos un buen año en lo deportivo. La afición disfrutó mucho del fútbol del equipo. Hay que quedarse con todo el año.
¿Cuál crees que es el techo de este equipo? José Juan, en una rueda de prensa la pasada temporada, comentó que el Lugo podía experimentar un crecimiento similar como el Numancia. Lolo Pavón, al ser preguntado sobre esa comparación, dijo que puede haber ciertas similitudes.
Son equipos humildes en la categoría. Lo que tienen es lo que tienen, no se pasan de lo que tienen. Son serios en ese aspecto. Sí que es verdad que lo primero que hay que hacer es consolidarse en la categoría. Estar un par, tres o cuatro años en Segunda es importante. También es importante para el club económicamente. Luego el techo ya se verá hasta dónde somos capaces de llegar.
¿Qué aspectos crees que debes mejorar? Descríbete como lateral derecho.
No me ha gustado nunca describirme, pero…
Si no es describirte, ¿qué es lo que te gusta aportar en el campo?
Sobre todo, trabajo y trabajo, que es lo mínimo que un futbolista tiene que aportar. Intensidad, trabajo y que cuando uno salga del campo no pueda ni andar. En ese aspecto, estoy tranquilo. En cada partido, no solo en el Lugo, sino en toda mi carrera, he, por lo menos, intentado dar el máximo. Para describirme ya están aficionados y periodistas.
¿Qué destacarías de Víctor Díaz, tu compañero de demarcación? Víctor es polivalente y puede jugar de lateral derecho, central, lateral izquierdo, interior derecho e incluso la pasada temporada ante el Recreativo disputó minutos como interior izquierdo.
Como tú has dicho, tener un jugador en la plantilla como Víctor es muy importante porque la Liga es muy larga, hacen falta jugadores en determinados puestos y tener a alguien como él que pueda jugar en cuatro o cinco demarcaciones es muy importante para el equipo. Juegue donde juegue, sabes que te va a dar el 100 %, va a cumplir, es buen futbolista y tenemos que estar tranquilos porque la demarcación de lateral derecho está muy bien cubierta con él.
¿Hay pique porque él se haya formado en el Sevilla y tú en el Betis? ¿Alguna vez bromeasteis con ese tema?
Algo hay. Cuando se jugó el año pasado el derby en Sevilla sí que por el móvil algún comentario se pudo hacer.
Vamos a recordar tu trayectoria. Primero, la cantera del Betis. Con el Betis juvenil fuiste campeón de la Copa del Rey y la Supercopa sub-19 en 1999, así como ascendiste a Segunda B en 2001. Incluso ganaste un Trofeo Carranza con el primer equipo y coincidiste en el segundo equipo con Joaquín. ¿Qué valoración haces de tu etapa en la cantera del Betis y los cuatro años en el filial?
Valoración muy positiva. Llegué allí a las categorías inferiores en un puesto en el que no estoy jugando ahora: de central. Allí me reubicaron de lateral y ha sido lo más importante que me ha pasado porque si no, por mi condición, no hubiera llegado a lo que he llegado. Sobre todo, la formación que me dieron allí en el filial fue muy importante para mí tanto en lo personal como en lo deportivo. Me tengo que quedar con eso. Igual me quedé con la espinita de no haber debutado con el equipo de mi ciudad, con mi equipo. Soy bético desde pequeñito, pero me quedo con lo positivo.
¿Qué entrenador tomó la decisión de reubicarte como lateral derecho?
Miguel Valenzuela, entrenador de los juveniles.
¿Con quién tuviste más amistad en el Betis y mantienes relación? Me comentaste en privado que tenías relación con Joaquín, incluso.
Toni Doblas. Con Joaquín ahora menos. Con Doblas y Dani son los que más puedo ver por Sevilla y son con los que más contacto mantengo.
Ceuta.
También muy positiva para mí porque era la primera vez que salía de casa. No sabía cómo iba a responder. Me iba a una ciudad que, en teoría, la gente hablaba que era difícil para vivir. Están equivocados. Es una ciudad muy tranquila donde se puede vivir muy bien y se puede disfrutar del fútbol. Estuve dos años y disfruté mucho del fútbol. Jugamos una liguilla de ascenso a Segunda. No pudo ser, no pudimos ascender, pero ahí también seguí creciendo como futbolista y como persona.
Xerez.
Ahí fue donde di el salto a Segunda. Cumplí un sueño más: jugar en Segunda y es un escaloncito más. Pasé dos años y medio allí, jugué muchos partidos e hicimos buen año. El primer año estuvimos en puestos de ascenso durante mucho tiempo. No pudo ser al final. Otro escaloncito más que subí y muy contento.
Real Murcia. Debutaste en Primera ante el Real Madrid en noviembre de 2007 en un partido televisado por La Sexta y jugaste 22 partidos.
Ahí ya sí que ya fue cumplir el sueño de cualquier jugador: debutar en Primera y jugar contra un equipo como el Real Madrid. Encima, no perder. Empatamos a un gol. Muy contento. Fue el equipo que me dio la oportunidad de jugar en Primera y seguir creciendo también. Viví buenos y muy malos momentos porque tuvimos un descenso, pero el trato fue muy bueno, la gente me trató bastante bien. El club también se portó muy bien con nosotros. Hay que sacar lo positivo siempre.
¿Cómo te encontraste enfrentándote a rivales de Primera?
Está claro que al principio te cuesta un poco porque el ritmo de partidos cambia mucho. Es mucho más intenso, no hay tantas paradas, más ida y vuelta. Me acostumbré bien, cogí el ritmo. No lo pasamos muy bien este año, pero en lo personal disfruté bastante del fútbol.
¿Qué fue lo que más te impresionó de jugar en Primera? Incluso jugaste en el Camp Nou frente al Barça.
Sí, pero el debut contra el Real Madrid fue el que más me impresionó porque una semana antes estaba jugando en Segunda con el Xerez. De una semana a otra se hizo todo y a la siguiente estaba jugando contra el Madrid. Cuando me estaba dando la mano con los jugadores del Madrid estaba como que no me lo creía. Ése fue el momento.
¿Con qué compañeros te quedas de aquella etapa? ¿Con quién conectaste más y mantienes contacto?
Allí tengo muy buenos compañeros. Con Miguel Albiol quizá, con el que hablo mucho, o Chando, con el que también tuve la oportunidad de coincidir en el filial del Betis cuando éramos jovencitos los dos. Con ellos dos me llevé muy bien allí.
Córdoba.
Un club en el que tuvimos un buen año en lo deportivo, pero no puedo decir lo mismo del trato personal porque no nos trataron muy bien. Hubo un concurso en el que metieron a los jugadores. En pretemporada hubo unos despidos. En Córdoba solo me quedo con lo deportivo, con otra cuestión no me puedo quedar.
Por último, el Cádiz.
Cualquier jugador que haya jugado en el Cádiz sabe que ir a ese club, aunque sea en Segunda B, no es ningún paso atrás. Jugar en el Cádiz y en el Carranza es especial. El que haya ido a ver al Lugo a Cádiz sabe de lo que hablo. Tuvimos la mala suerte de no haber ascendido. Fue un año bastante agradable en la que disfrutamos mucho del fútbol. Fue una pena aquello, pero tengo que pensar que estoy en el Lugo, que me vino bien, y muy contento de haber pertenecido a ese club.
En tu etapa profesional has anotado seis goles, pero todos ellos de muy bella factura. La temporada pasada marcaste uno precioso ante la U.D. Las Palmas, otro con el Murcia culminando una remontada tras un 2-0 adverso ante el Celta en Balaídos rematando un córner en la zona izquierda del área, otro precioso con el Cádiz sin apenas ángulo ante el Villanovense y, por ejemplo, uno con el Córdoba después de comenzar la jugada en tu campo. ¿Cómo vive un jugador como tú, que en principio no anota muchos goles aunque sí es cierto que subes mucho la banda, el marcar un tanto y qué recuerdos tienes de todos estos que te cito?
Muy buenos recuerdos. Los goles que has comentado son goles importantes. Sirvieron para conseguir puntos. No soy de marcar goles, cuando marco me vuelvo loco y lo disfruto mucho. Sobre todo, me quedo con el gol contra el Celta con el Murcia. Nos dio media permanencia. Estábamos ahí abajo y fue muy importante para los jugadores y para el club. Fue con el que más disfruté.
¿Qué hace especial al Lugo con respecto a tus anteriores clubes?
Lo que le hace especial es que un jugador cuando llega al club y tiene el trato que tiene, con las facilidades que te dan para todo, para acoplarte, para que busques casa, se le coge cariño por todo. Desde el club y desde dentro del vestuario. Los compañeros hacen que, desde el primer día o cuando llevas una semana, parece que lleves dos años con ellos. Te tratan súper bien. La afición, lo mismo. Me trata súper bien. El trato que te dan es lo más especial.
¿Cómo te adaptaste a un equipo que prioriza tanto la salida de balón y con laterales que se despliegan tanto como Manu, Víctor Díaz o tú mismo? Asimismo, con centrales que son expertos iniciar jugada circulando el balón como Víctor Marco.
Está claro que cuando un equipo juega como lo hacemos nosotros es mucho más arriesgado y mucho más sacrificado. Tenemos que correr mucho más. Si el entrenador quiere que subamos al ataque tenemos que hacer muchos más kilómetros que de no apostar por este estilo. Me adapté bien al juego del Lugo. Quizá, mi forma de jugar siempre ha sido la de atacar, intentar incorporarme lo máximo posible y sí que es verdad que en este equipo todavía más. La adaptación fue buena.
¿Qué diferencias encuentras entre la Segunda actual y la Segunda en la que comenzaste en el Xerez?
Igual sí que puede estar un poquitín más igualada la categoría. Está más igualada en tema económico. Está claro que ahora la crisis no te permite tirar la casa por la ventana y hay mucha más igualdad entre los equipos. Sí hay cinco o seis equipos que destacan, que pueden tener un presupuesto más alto y que pueden contar con jugadores más técnicos y con más calidad, pero ahora la categoría está mucho más igualada que antes.
¿Qué equipos y jugadores destacarías de Segunda? ¿Quién te sorprendió más la temporada pasada?
Uno de los que más trabajo nos costó fue el Castilla. Allí en su campo todavía más. Ya vemos que son jugadores que ahora mismo están en el Real Madrid o en equipos importantes de Primera División. Así que algo tenían que tener. Si me tengo que quedar con un equipo del año pasado ése es el Girona. Como equipo es el que más me sorprendió. El que más trabajado estaba, el que más sabía lo que tenía que hacer. Me quedo con el Girona.
¿Un lateral derecho de élite con el que te identifiques desde crío?
Me quedo con Panucci, entonces en el Real Madrid. Era el que más veía cuando estaba empezando en la demarcación.
¿Un futbolista con el que te identifiques del club por empatía personal y/o estilo de juego?
Con Lolo (Pavón), mismo. Me llevo bien con todos los compañeros. Lolo es mi compañero de habitación y paso mucho tiempo con él. Con José Juan también. Con Víctor Marco también nos juntamos mucho. Me llevo muy bien con todos y es muy difícil elegir a uno.
En una época donde los impagos y las dudas sobre la viabilidad de los clubes es un tema habitual, ¿hacia dónde crees que debe encaminar el fútbol y qué errores crees que se han cometido? Siempre se habla del Lugo que es un club serio, que paga al día, pese a tener una infraestructura más humilde.
En realidad, los jugadores no sabemos lo que pasa y los problemas en que se mete cada club. El mayor error es prometer contratos que no se pueden pagar. Es lo que ha pasado en muchos clubes. Tuve la mala suerte de vivir un proceso así en Córdoba donde me ofrecieron un contrato, lo firmé y luego no pudieron cumplir conmigo. Es uno de los mayores errores que hay y habrá en el mundo del fútbol. Te prometen cosas que luego no te pueden dar. A simple vista, los jugadores vemos esta cuestión como el principal problema.
Durante la pasada temporada y la actual has compartido entrenamientos, amistosos y un partido oficial en tercera ronda de la Copa del Rey el pasado mes de octubre con canteranos. ¿Qué valoración realizas de ellos? ¿Qué mensaje le enviarías como jugador ya veterano y formado en una cantera con solera como la del Real Betis? Los canteranos del Lugo tienen ante sí el ejemplo evidente de Iago.
La valoración tiene que ser positiva. Cinco o seis jugadores entrenan a diario con nosotros, dan el nivel y parecen uno más. Darles el consejo de seguir trabajando cuando vuelvan a su equipo, que sigan trabajando como lo hacen con nosotros y seguir esforzándose al máximo. Seguro que van a tener la oportunidad porque son buenos jugadores, tienen calidad y si están comprometidos con el club les llegará su opción.
Tienes contrato hasta final de temporada. ¿Te gustaría retirarte aquí?
Ahora mismo, lo que hablo con mi mujer y mi familia es eso. Estamos a gusto aquí en Lugo, nos están tratando muy bien y nuestra intención es la de seguir aquí el máximo de años posible. Eso ya no depende de mí.
Por último, ¿cómo te gustaría ser recordado?
Como buena persona fuera del campo. Dentro, pues que me juzguen si lo he hecho bien o mal, pero sobre todo porque se diga que he sido buena persona. Solo eso.