EL RETROVISOR
El CD Lugo y el fútbol lucense pierden a otro histórico, como Ángel Alonso Abelairas 'Geluco' que falleció ayer a los 77 años
El extinto y su hermano Luis, que falleció el pasado mes de julio, formaron parte del CD Lugo B, del colectivo arbitral lucense y del Coro San Antonio
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| Equipo del CD Lugo B, en la temporada 63-64, en el viejo estadio Ángel Carro de la Avenida de A Coruña, se pueden ver de izquierda a derecha, arriba, Domingo, Amador, Suso Arias, Víctor Bermúdez Mogo (entrenador), Geluco, Carito, Neno, Belda y Cao (directivo); agachados, Javier, Ernesto, Sanjurjo, Cervera y Mario |
El fútbol lucense perdió ayer a otro histórico, como Ángel Alonso Abelairas 'Geluco', a los 77 años de edad, después de luchar durante los últimos años con gran entereza con una delicada enfermedad que al final resultó ser irreversible.
Geluco Alonso Abelairas, como cariñosamente le conocían sus familiares, compañeros y amigos, fue una persona que se distinguió especialmente por dos cosas, como fueron su gran amor al fútbol en el que destacó sobre todo por su envergadura, lo que le permitió resaltar primero como delantero centro, posición en la que se despuntó especialmente por su juego de cabeza, por sus cerca de 1,90 de estatura, pero luego se distinguió durante bastantes años como árbitro de fútbol, formando parte del colectivo arbitral lucense, primero como colegiado de la Delegación en Lugo, del Comité Técnico Gallego y luego como informador y colaborador del colegio lucense.
Pero además 'Geluco' resaltó especialmente por su potente y modulada voz, que le hizo ganarse el afecto y la simpatía de muchos lucenses, que le pudieron oír durante muchos años, formando parte del Coro de San Antonio, en el que su potente y cuidada voz resaltaba sobre todas las demás, así como en las numerosas tertulias y reuniones de amigos, en las que el extinto era frecuente que pusiera sus notas de calidad con su su afinada voz y amplios repertorios, para hacerlas sin duda mucho más amenos los momentos de ocio con amigos y conocidos, que le recordarán para siempre, como una persona afable, alegre y de fácil conversación.
Los restos mortales de Ángel Alonso Abelairas, reposan en la sala número 2 de Velatorios Lucenses (detras del Hotel Santiago), donde fue instalada su capilla ardiente y donde hoy, a las nueve de la nhcoe, en la capilla de dichos velatorios, se oficiará una misa en su memoria.
La familia está recibiendo numerosas muestras de condolencia por diferentes conductos, en especial su esposa, Maria Victoria Casanova Cibreiro, hijas, María del Carmen y María Victoria Alonso Casanova, así como sus hijos políticos, Jesús Vázquez Castro y Sergio Ansedes Cancela, nietos, hermanos, hermanos políticos y demás familia, algo que se repetirá mañana, tanto en los mismos velatorios, de donde las CUATRO saldrá el cadáver, como en la iglesia parroquial de San Antonio, donde a las CUATRO Y MEDIA se celebrará el funeral de entierro, como en el cementerio municipal de San Froilán, donde a continuación serán inhumados sus restos mortales, en el panteón familiar. Descanse en paz.
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| Formación del CD Lugo B, en el viejo estadio Ángel Carro, de la Avenida de A Coruña, en la temporada 63-64, aparecen arriba, Luis Alonso, Charles, Amador, Portela, Carito, Neno y Belda. Abao, Javier, Tomás, Careto, Fontenla y Geluco, en partido del Campeonato de España de Aficionados, disputado el 1 de octubre de 1963, en el que el CD Lugo se había impuesto por 6-1 con goles de Careto (2), Geluco (2), Carito y Javier y de Nito para el Calvo Sotelo de As Pontes |
El pasado 24 de julio también falleció, a los 75 años de edad, Luis Alonso Abelairas 'Clavelito' hermano muy unido a 'Geluco', ya que ambos practicaron el fútbol y llegaron a jugar juntos en el CD Lugo B, entre otros equipos, luego ambos formaron parte de la Delegación en Lugo del Comité Técnico Gallego de Árbitros de Fútbol y además ambos formaron parte durante muchos años del popular Coro de San Antonio.
El funeral por Luis Alonso Abelairas, tuvo lugar el sábado 25 de julio de 2015, en la iglesia parroquial de San Lorenzo de Albeiros, por lo que en poco más de medio año ambos hermanos nos dejaron después de sobrellevar con gran entereza una enfermedad que al final resultó irreversible.
Fué a finales del año 1968 cuando me hice cargo de el CORO DE SAN ANTONIO,que venía actuando en la Parroquiua.Eran unos 15 componentes,que procedían de antiguas formaciones corales y que tenían una muy interesante voz destacando GELUCO Y ANGELILLO, ambos grandes interprtes de JOTAS con una no disimulada pero sincera rivalìdad. A partir de esa fecha y aun mas adelante cuando la colectividad pasó a estar formada por mas de 30 voces(voces graves siempre), al crearse la correspondiente Asociación Cultural, Geluco pasó a ser el Presidente desde cuyo cargo ayudó a la incorporación de muchos nuevos cantores,empezando a tener una cierta entidad cultural dentro de Lugo y provincia que aún perdura hoy en día.En fín sin pasarme en muchos ditirambos,puede decirse que hasta su enfermedad siempre fue una garantía para el normal desenvolvimiento del COR SAN ANTONIO. En su funeral , y con la emoción que nos embargaba y con nuestro uniforme de gala le rendimos el último homenaje,cantando polifonicamente las canciones propìas de las exequias. ¡Hasta siempre amigo GELUCO!
ResponderEliminarFué a finales del año 1968 cuando me hice cargo de el CORO DE SAN ANTONIO,que venía actuando en la Parroquiua.Eran unos 15 componentes,que procedían de antiguas formaciones corales y que tenían una muy interesante voz destacando GELUCO Y ANGELILLO, ambos grandes interprtes de JOTAS con una no disimulada pero sincera rivalìdad. A partir de esa fecha y aun mas adelante cuando la colectividad pasó a estar formada por mas de 30 voces(voces graves siempre), al crearse la correspondiente Asociación Cultural, Geluco pasó a ser el Presidente desde cuyo cargo ayudó a la incorporación de muchos nuevos cantores,empezando a tener una cierta entidad cultural dentro de Lugo y provincia que aún perdura hoy en día.En fín sin pasarme en muchos ditirambos,puede decirse que hasta su enfermedad siempre fue una garantía para el normal desenvolvimiento del COR SAN ANTONIO. En su funeral , y con la emoción que nos embargaba y con nuestro uniforme de gala le rendimos el último homenaje,cantando polifonicamente las canciones propìas de las exequias. ¡Hasta siempre amigo GELUCO!
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